mio madre

Mio madre nun sabía idiomes pero yera tan mimosa... dicíame que con enfotu pues algamar cualquier cosa. Mio madre nun sabía idiomes pero falaba a les freses, facía ensalada rusa y mil tortielles franceses. Mio madre nun sabía idiomes pues pisó poques escueles, ¡y facía un caldu gallego y unes coles de Bruseles...! Mio madre nun sabía idiomes, yera una madre estupenda, facía arroz a la cubana con salsa a la boloñesa. ...Primeros versos del poemario Mio madre, de Aurelio González Ovies, editado por Pintar -Pintar, abril 2010 (Edición en asturiano)

jueves, 14 de julio de 2011

TORRIJAS FÁCILES

Las tenemos que dejar freír despacín para que se hagan bien por dentro y no se quemen por fuera.
Supongo que alguna vez os pasará lo mismo que a mí, que pocas veces acierto con el pan que compro. Así que me sobra bastante. Lo utilizo para hacer el pan rallado, pero en ocasiones hago estas riquísimas torrijas. Son muy fáciles y baratinas. En verano, las preparo por la noche y las dejo enfriar en la nevera, frías están muy buenas.

UN POEMA DE AURELIO GONZÁLEZ OVIES:


NECESITAMOS
  • 1 barra de pan del día anterior
  • 4 huevos grandes
  • 1 litro de leche
  • 1 ramita de canela
  • la piel, sin lo blanco, de medio limón
  • 100 gramos de azúcar
  • 1 copina de anís, un chorrín
  • una cucharadita de azúcar avainillado
  • canela en polvo y azúcar para espolvorear
  • aceite de oliva
Si les ponemos cobertura de cualquier tipo de chocolate, una vez frías, están buenísimas.

ELABORACIÓN

Ponemos la leche a hervir con la ramita de canela,  piel de limón,  anís, azúcar y el avainillado.

Una vez que hierva, separamos del fuego y dejamos templar.

Añadimos los huevos batidos y mezclamos bien. Colamos.

Cortamos la barra del pan en rodajas de centímetro y medio de ancho.

Las colocamos en una fuente amplia, de manera que queden todas en la base, sin que estén apiladas.

Ya bien colocadas, echamos por arriba, despacio y sobre una cuchara sopera puesta hacía abajo, la mezcla de la leche. (La cuchara la ponemos para que el líquido no caiga de golpe sobre el pan, lo abriría y después, al freir, rompe la torrija)

Esperamos media hora para que se empapen bien y ponemos a calentar abundante aceite en una sartén.

Vamos friendo de pocas en pocas, primero por un lado y cuando estén bien doradinas, les damos la vuelta y las freímos por el otro lado.

Sacamos a una fuente con papel de cocina y las vamos espolvoreando, aún calientes, de canela y azúcar a gusto de cada uno.

Servir frías o templadas.

Quedan muy suaves y ahorramos mucho tiempo al no tener que rebozar.

¡QUE VOS PRESTEN!